Mis primeros crêpes, hechos por mí bajo la supervisión de mis mentores, Paola y Alejandro. No está mal para lo poco acostumbrada que estoy a empuñar la sartén ;)
Komplikasi Diabetes Melitus
Hace 9 años
martes, 28 de octubre de 2008
domingo, 26 de octubre de 2008
Primera visita al Louvre
El viernes por la tarde el Louvre es gratis para menores de 26 años. Cierra a las diez de la noche. Paola y yo no lo dudamos un segundo en cuanto lo supimos. De hecho, se podría incluso decir que ya íbamos con retraso, teniendo en cuenta que vivimos a un paso del museo. Por eso este viernes a la salida de clase nos dirigimos directamente a la explanada de la Pirámide de Cristal .Ya nos hemos habituado a verla alzarse en medio del Palacio del Louvre. Sin embargo, al principio me pareció que perturbaba demasiado el entorno, la forma en que se impone a los ojos del visitante rompiendo con el estilo arquitectónico del museo. Ahora, en cambio, me extrañaría no verla allí, sobretodo cuando vuelvo a casa por las noches y brilla con reflejos de plata.
Una vez dentro del Louvre, decidimos empezar por la segunda planta, para ver las pinturas flamencas y francesas del siglo XVII. Nos dejamos llevar por las obras y al final, cada una de nosotras halló su propio ritmo; de manera tácita nos esperábamos al final de cada sala, y en la siguiente nos volvíamos a separar.
Tengo la costumbre, cuando voy al Museo del Prado, de tratar de desentrañar la escena e identificar a los personajes de los cuadros que no conozco, antes de leer el título y el autor. Y el viernes lo volví a hacer. Hay temas mitológicos recurrentes que aunque me gusten, sin embargo todavía me cuesta retener: los nombres de las nueve musas: Clío, Talía, Erato, Calíope... confundo el rapto de Proserpina con el de Helena de Troya, y todavía dudo cuando veo al mensajero de los dioses, Mercurio, con sus sandalias aladas. Me detengo ante los mitos representados con menos frecuencia: Andrómada servida de merienda al monstruo marino y Atalanta deteniéndose a recoger las manzanas doradas por el camino mientras Hipómenes le llevala delantera. Al Amor representado como un bebé rechonchito con alitas le he acabado cogiendo manía.
Los temas religiosos me resultan más familiares y fáciles de identificar. A los bodegones y naturalezas muertas en general no les presto demasiada atención. Me detengo especialmente en los retratos de reyes, como aquél de Luis XIV del Louvre que eclipsa a todos los demás de la misma sala, y me fijo más bien poco en los obispos, cardenales y demás personajes lúgubres.
Llegó un momento en que dejamos de consultar el plano y nos acabamos desviando a la pintura francesa del S.XIX. Vimos algunos cuadros impresionistas pero comenzamos a sentir el cansancio de toda la semana y decidimos hacer una nueva ronda el próximo viernes. Cuando nos dirigíamos a la salida, vimos un cartel que indicaba la sala de la Gioconda, y nos picó la curiosidad. Sabíamos que nos encontraríamos un cuadro más bien pequeño, en el que uno no se fijaría en condiciones normales. Atravesamos dos o tres salas de esculturas expresamente para ver a la mujer de sonrisa enigmática que contempla desde hace siglos cómo se ha construido un gran misterio a su alrededor, cuando, lo más probable según me comentaba Paola, es que Da Vinci pintara el cuadro en pago por el alojamiento en casa de Giocondo.
El Louvre nos deparaba otra sorpresa: de improviso, en lo alto de una escalera, posada sobre la proa de un navío, con las alas extendidas y una pierna adelantada sobre la otra, la Victoria de Samotracia, una de mis esculturas preferidas.
Con esta visión, nos fuimos del Louvre, a punto de cerrar. Por el camino me vino a la mente la insinuación del best-seller más manoseado de los últimos tiempos, El Código da Vinci, (no lo he leído pero reconozco haber visto la película, mea culpa...) de que la tumba de María Magdalena se encontraba bajo la Pirámide, basándose en que el triangulito es el símbolo de la mujer y patatín y patatán. ¿Por qué los falsos historiadores del siglo XXI tratan de encontrar y es más, se regodean, en los detalles más morbosos de la Biblia? ¿Por qué si has leído Los hijos del Grial de Peter Berling parece que posees una cultura privilegiada en un tema que, en mi opinión, ya aburre por lo mucho que lo están machacando y reinventando? Por qué no, simplemente, lo dejamos estar....
Una vez dentro del Louvre, decidimos empezar por la segunda planta, para ver las pinturas flamencas y francesas del siglo XVII. Nos dejamos llevar por las obras y al final, cada una de nosotras halló su propio ritmo; de manera tácita nos esperábamos al final de cada sala, y en la siguiente nos volvíamos a separar.
Tengo la costumbre, cuando voy al Museo del Prado, de tratar de desentrañar la escena e identificar a los personajes de los cuadros que no conozco, antes de leer el título y el autor. Y el viernes lo volví a hacer. Hay temas mitológicos recurrentes que aunque me gusten, sin embargo todavía me cuesta retener: los nombres de las nueve musas: Clío, Talía, Erato, Calíope... confundo el rapto de Proserpina con el de Helena de Troya, y todavía dudo cuando veo al mensajero de los dioses, Mercurio, con sus sandalias aladas. Me detengo ante los mitos representados con menos frecuencia: Andrómada servida de merienda al monstruo marino y Atalanta deteniéndose a recoger las manzanas doradas por el camino mientras Hipómenes le llevala delantera. Al Amor representado como un bebé rechonchito con alitas le he acabado cogiendo manía.
Los temas religiosos me resultan más familiares y fáciles de identificar. A los bodegones y naturalezas muertas en general no les presto demasiada atención. Me detengo especialmente en los retratos de reyes, como aquél de Luis XIV del Louvre que eclipsa a todos los demás de la misma sala, y me fijo más bien poco en los obispos, cardenales y demás personajes lúgubres.
Llegó un momento en que dejamos de consultar el plano y nos acabamos desviando a la pintura francesa del S.XIX. Vimos algunos cuadros impresionistas pero comenzamos a sentir el cansancio de toda la semana y decidimos hacer una nueva ronda el próximo viernes. Cuando nos dirigíamos a la salida, vimos un cartel que indicaba la sala de la Gioconda, y nos picó la curiosidad. Sabíamos que nos encontraríamos un cuadro más bien pequeño, en el que uno no se fijaría en condiciones normales. Atravesamos dos o tres salas de esculturas expresamente para ver a la mujer de sonrisa enigmática que contempla desde hace siglos cómo se ha construido un gran misterio a su alrededor, cuando, lo más probable según me comentaba Paola, es que Da Vinci pintara el cuadro en pago por el alojamiento en casa de Giocondo.
El Louvre nos deparaba otra sorpresa: de improviso, en lo alto de una escalera, posada sobre la proa de un navío, con las alas extendidas y una pierna adelantada sobre la otra, la Victoria de Samotracia, una de mis esculturas preferidas.
Con esta visión, nos fuimos del Louvre, a punto de cerrar. Por el camino me vino a la mente la insinuación del best-seller más manoseado de los últimos tiempos, El Código da Vinci, (no lo he leído pero reconozco haber visto la película, mea culpa...) de que la tumba de María Magdalena se encontraba bajo la Pirámide, basándose en que el triangulito es el símbolo de la mujer y patatín y patatán. ¿Por qué los falsos historiadores del siglo XXI tratan de encontrar y es más, se regodean, en los detalles más morbosos de la Biblia? ¿Por qué si has leído Los hijos del Grial de Peter Berling parece que posees una cultura privilegiada en un tema que, en mi opinión, ya aburre por lo mucho que lo están machacando y reinventando? Por qué no, simplemente, lo dejamos estar....
viernes, 24 de octubre de 2008
Les Profs
Hace días que pensaba incluir una breve descripción de mis profesores en Sciences Po, y ahora que Paola acaba de descubrir en internet que Mattias G., que nos da Droit Public Comparé entre le Royaume Uni et la France, tiene un club de fans en facebook, me he dedidido por completo. Y es que no me extraña nada que las chicas de Sciences Po hayan creado un club de fans de Mattias G., porque además de ser guapísimo tiene mucho sentido del humor, lástima que la mayoría de las veces hable tan rápido que no consiga entenderlo, y se produzca uno de esos momentos "miserasmus" en los que ves que toda la clase se ríe de algo y tú no sabes de qué porque te has perdido desde el principio mismo del chiste.
Así pues, paso a enumerar el elenco de los profesores más destacados que tenemos este cuatrimestre (sin poner sus nombres completos por si las moscas). En primer lugar, la clase magistral de Droit Public la da Y. A. Nos lo solemos encontrar por la calle llegando a Sciences Po en bicicleta, muy sonriente. Explica muy bien, a veces baja un poco el tono de voz pero en general no tenemos problemas para entenderle y sus clases, aunque largas, se nos hacen bastante amenas; de hecho es el único que nos da diez minutos de descanso en una clase de dos horas seguidas. La esencia del temario de esta asignatura es Derecho Constitucional, Derecho Administrativo y algo de Derecho Internacional Público, lo que constituye una ventaja para nosotros tres porque son nociones que hemos estudiado a fondo durante los cinco años de carrera. Así se nos hace fácil seguir las explicaciones e incluso, a la vista del programa, anticiparnos a ellas.
La asignatura de Droit Public no sólo supone una clase magistral a la semana sino también una "Conférence de méthode", o clase práctica los viernes en la que se presentan las Exposés y se profundiza en los temas que se han tratado el martes con Y. A. Paola está en otro grupo. El primer viernes Alejandro y yo nos confundimos y nos metimos en la clase de Paola, pensando que era también la nuestra, y nos extrañó que no nos nombraran cuando pasaron lista. Esa tarde nos llegó un email diciéndonos que "nos habían echado de menos" en otra clase a la misma hora. Y realmente fue un alivio porque a Paola le da clase una señora muy antipática y misógina y que además es una defensora a ultranza de la paridad (¿habráse visto mayor disparate?). A esta señora fui a decirle, lo más educadamente que me permitía mi escaso francés, que a mí no se me había asignado ningún tema para la exposé, y me preguntó desdeñosamente si le estaba insinuando que aquéllo era un error por parte de ella. En cambio, con los chicos sonríe y todo. Definitivamente, misógina.
Así que Ale y yo estamos los viernes en otro grupo. Cuál sería nuestra sorpresa cuando conocimos a nuestro profesor, J. B., un niño de 26 años!!!! Es letrado en el Tribunal de Cuentas. Debe de ser muy inteligente para estar tan joven en ese puesto. A él me cuesta más seguirle porque habla a toda velocidad, y sin embargo es muy atento con nosotros y nos ha dicho que no dudemos en preguntarle lo que no entendamos.
Y el equipo sin duda más pintoresco es el de Droit Public Comparé. Por un lado, tenemos a D. F, escocés de melena larga rubia que se ha quedado en Francia "par amour", como él mismo reconoció el primer día, y al que entendemos perfectamente ya que al no ser francófono de origen, habla más pausadamente; junto a D., se encuentre Mattias. G, por sus rasgos sospechamos que tiene ascendencia hindú. Es comisario del Gobierno en el Consejo de Estado y hace poco emitió una decisión muy relevante en materia del valor constitucional de la Carta del Medio Ambiente, incluida desde 2004 en el Preámbulo de la Constitución francesa. Como decía al principio, es muy gracioso y a nosotros tres nos tiene en cuenta en clase, bueno, si se puede llamar "tener en cuenta" el preguntarle a Ale por el licor de banana y si habíamos visto Vicky Cristina Barcelona.
El tercer profesor de Droit Comparé es B. S. y con el cual no hemos tenido muy buen comienzo. Oíamos hablar de él en todas las asignaturas, sus manuales se incluyen en todas las bibliografías, nos dijeros que fue Presidente del Conseil d' Etat y de las personas que más saben en Francia de tal y de cual, caballero de la Orden de no sé cuánto, vamos, que cuando entrara en clase había que hacerle la ola ;). Y el día que por fin lo tuvimos en clase, (aclaración: las clases de droit public se dan entre dos profesores), junto con Mattias G., nos preguntó por la política española en materia de la permisión del velo como símbolo religioso,y no debió creer lo que le respondimos, porque se nos quedó mirando con cara de desconfianza y el resto de la hora no dejó de observarnos por el rabillo del ojo. Y para colmo, el miércoles pasado tuvimos que presentar una exposé sobre las reformas de la constitución francesa ( 24 reformas en total, la broma nos costó dos noches hasta las cuatro de la mañana bebiendo litros de café) y las perspectivas de continuidad (nuestra perspectiva era que se dejaran de tonterias y admitieran de una vez que con Sarkozy había llegado la VI República); resumiendo, digamos que nuestra exposé no "satisfizo" a B. S, por una serie de razones muy largas de explicar ahora y de las que nos declaramos inocentes. El único que se mostró más comprensivo con nosotros fue D. F. lo cual nos ayudó a quitarnos el mal sabor de boca que nos había dejado el comentario de la doctrina allí personificada.
No puedo olvidarme de E. H, la profesora de Français sur la vie artistique. Es encantadora. Me encantan sus clases, las disfruto de principio a fin. No es sólo el hecho de que seamos todos extranjeros y ella sepa exactamente como dirigirse a nosotros y como impartir la asignatura, tomando el tiempo necesario para explicar palabras, ideas y contextos que no conocemos, sino que es también la luminosa sonrisa con la que llega siempre a clase, sus anécdotas, la forma en la que nos pregunta por nuestra opinión y nos invita a participar en el debate.
Finalmente, nos queda Y. S, de Introduction al analyse des Politiques Publiques, y que por cierto también lo hemos encontrado en el facebook. Físicamente, también se merece tener un club de fans, jeje. Sus clases son un poco monótonas, de vez en cuando pone ejemplos interesantes, sobretodo de la Guerra Fría y de la Administración Kennedy, pero en general la asignatura podría dar mucho más juego. Y me ha tocado hacer un trabajo sobre la Reforma de las Pensiones, uuuhhh qué divertido :(.
De todas formas, aunque este post haya sido más bien satírico, tengo que reconocer que los profesores que me han tocado ( por no decir que el 100% de los de Sciences Po) son personajes muy inteligentes y reconocidos, así que es toda una oportunidad poder asistir a sus clases.
Así pues, paso a enumerar el elenco de los profesores más destacados que tenemos este cuatrimestre (sin poner sus nombres completos por si las moscas). En primer lugar, la clase magistral de Droit Public la da Y. A. Nos lo solemos encontrar por la calle llegando a Sciences Po en bicicleta, muy sonriente. Explica muy bien, a veces baja un poco el tono de voz pero en general no tenemos problemas para entenderle y sus clases, aunque largas, se nos hacen bastante amenas; de hecho es el único que nos da diez minutos de descanso en una clase de dos horas seguidas. La esencia del temario de esta asignatura es Derecho Constitucional, Derecho Administrativo y algo de Derecho Internacional Público, lo que constituye una ventaja para nosotros tres porque son nociones que hemos estudiado a fondo durante los cinco años de carrera. Así se nos hace fácil seguir las explicaciones e incluso, a la vista del programa, anticiparnos a ellas.
La asignatura de Droit Public no sólo supone una clase magistral a la semana sino también una "Conférence de méthode", o clase práctica los viernes en la que se presentan las Exposés y se profundiza en los temas que se han tratado el martes con Y. A. Paola está en otro grupo. El primer viernes Alejandro y yo nos confundimos y nos metimos en la clase de Paola, pensando que era también la nuestra, y nos extrañó que no nos nombraran cuando pasaron lista. Esa tarde nos llegó un email diciéndonos que "nos habían echado de menos" en otra clase a la misma hora. Y realmente fue un alivio porque a Paola le da clase una señora muy antipática y misógina y que además es una defensora a ultranza de la paridad (¿habráse visto mayor disparate?). A esta señora fui a decirle, lo más educadamente que me permitía mi escaso francés, que a mí no se me había asignado ningún tema para la exposé, y me preguntó desdeñosamente si le estaba insinuando que aquéllo era un error por parte de ella. En cambio, con los chicos sonríe y todo. Definitivamente, misógina.
Así que Ale y yo estamos los viernes en otro grupo. Cuál sería nuestra sorpresa cuando conocimos a nuestro profesor, J. B., un niño de 26 años!!!! Es letrado en el Tribunal de Cuentas. Debe de ser muy inteligente para estar tan joven en ese puesto. A él me cuesta más seguirle porque habla a toda velocidad, y sin embargo es muy atento con nosotros y nos ha dicho que no dudemos en preguntarle lo que no entendamos.
Y el equipo sin duda más pintoresco es el de Droit Public Comparé. Por un lado, tenemos a D. F, escocés de melena larga rubia que se ha quedado en Francia "par amour", como él mismo reconoció el primer día, y al que entendemos perfectamente ya que al no ser francófono de origen, habla más pausadamente; junto a D., se encuentre Mattias. G, por sus rasgos sospechamos que tiene ascendencia hindú. Es comisario del Gobierno en el Consejo de Estado y hace poco emitió una decisión muy relevante en materia del valor constitucional de la Carta del Medio Ambiente, incluida desde 2004 en el Preámbulo de la Constitución francesa. Como decía al principio, es muy gracioso y a nosotros tres nos tiene en cuenta en clase, bueno, si se puede llamar "tener en cuenta" el preguntarle a Ale por el licor de banana y si habíamos visto Vicky Cristina Barcelona.
El tercer profesor de Droit Comparé es B. S. y con el cual no hemos tenido muy buen comienzo. Oíamos hablar de él en todas las asignaturas, sus manuales se incluyen en todas las bibliografías, nos dijeros que fue Presidente del Conseil d' Etat y de las personas que más saben en Francia de tal y de cual, caballero de la Orden de no sé cuánto, vamos, que cuando entrara en clase había que hacerle la ola ;). Y el día que por fin lo tuvimos en clase, (aclaración: las clases de droit public se dan entre dos profesores), junto con Mattias G., nos preguntó por la política española en materia de la permisión del velo como símbolo religioso,y no debió creer lo que le respondimos, porque se nos quedó mirando con cara de desconfianza y el resto de la hora no dejó de observarnos por el rabillo del ojo. Y para colmo, el miércoles pasado tuvimos que presentar una exposé sobre las reformas de la constitución francesa ( 24 reformas en total, la broma nos costó dos noches hasta las cuatro de la mañana bebiendo litros de café) y las perspectivas de continuidad (nuestra perspectiva era que se dejaran de tonterias y admitieran de una vez que con Sarkozy había llegado la VI República); resumiendo, digamos que nuestra exposé no "satisfizo" a B. S, por una serie de razones muy largas de explicar ahora y de las que nos declaramos inocentes. El único que se mostró más comprensivo con nosotros fue D. F. lo cual nos ayudó a quitarnos el mal sabor de boca que nos había dejado el comentario de la doctrina allí personificada.
No puedo olvidarme de E. H, la profesora de Français sur la vie artistique. Es encantadora. Me encantan sus clases, las disfruto de principio a fin. No es sólo el hecho de que seamos todos extranjeros y ella sepa exactamente como dirigirse a nosotros y como impartir la asignatura, tomando el tiempo necesario para explicar palabras, ideas y contextos que no conocemos, sino que es también la luminosa sonrisa con la que llega siempre a clase, sus anécdotas, la forma en la que nos pregunta por nuestra opinión y nos invita a participar en el debate.
Finalmente, nos queda Y. S, de Introduction al analyse des Politiques Publiques, y que por cierto también lo hemos encontrado en el facebook. Físicamente, también se merece tener un club de fans, jeje. Sus clases son un poco monótonas, de vez en cuando pone ejemplos interesantes, sobretodo de la Guerra Fría y de la Administración Kennedy, pero en general la asignatura podría dar mucho más juego. Y me ha tocado hacer un trabajo sobre la Reforma de las Pensiones, uuuhhh qué divertido :(.
De todas formas, aunque este post haya sido más bien satírico, tengo que reconocer que los profesores que me han tocado ( por no decir que el 100% de los de Sciences Po) son personajes muy inteligentes y reconocidos, así que es toda una oportunidad poder asistir a sus clases.
domingo, 19 de octubre de 2008
Poema de Benedetti
Para Celtix, ante su próxima venida:
Bienvenido
Se me ocurre que vas a llegar distinto,
no exactamente más lindo
ni más fuerte
ni más dócil
ni más cauto
tan sólo que vas a llegar distinto
como si esta temporada de no verme
te hubiera sorprendido a vos también
quizá porque sabés
como te pienso y te enumero
después de todo la nostalgia existe
aunque no lloremos en los andenes fantasmales
ni sobre las almohadas de candor
ni bajo el cielo opaco
yo nostalgio
tú nostalgias
y cómo me revienta que él nostalgie
tu rostro es la vanguardia
tal vez llega primero
porque lo pinto en las paredes
con trazos invisibles y seguros
no olvides que tu rostro
me mira como pueblo
sonríe y rabia y canta
como pueblo
y eso te da una lumbre
inapagable
ahora no tengo dudas
vas a llegar distinto y con señales
con nuevas
con hondura
con franqueza
sé que voy a quererte sin preguntas
sé que vas a quererme sin respuestas
jueves, 16 de octubre de 2008
Escapada
Mes chers compatriots,
ante la insistencia de frikinautico y de lapi ( perdonenme la ausencia de los acentos pero estoy en el teclado gabacho), no puedo menos que contar algo mas, aunque lo cierto es que tampoco hay muchas novedades.
El martes por la tarde sali a dar un paseo a los Campos Eliseos. Eran las cinco y estaba cayendo una llovizna intermitente, como dicen en Santiago, un calabobos, pero no me apetecia nada seguir con la aburrida tarea de pasar apuntes a limpio. No se supone que estoy aqui de Erasmus? Pues a la calle! A conocer Paris, que ya llegara el momento de estudiar.
Es muy facil ir a los Campos Eliseos desde mi casa. Solo hay que seguir la rue Saint Honoré hasta la Place de la Vendôme ( la plaza de la Vendimia). Vendôme es una palabra francesa que me encanta, no sabria decir por qué. A continuacion se encuentra la rue Royale, y saben qué descubri, asi, sin buscarlo a proposito? El cabaret Maxim's! Por un momento dudé de que fuera el mismo de La viuda alegre, ( "I'm going to Maxim's, where all the girls are prim...") pero lo acabo de comprobar en internet y es el mismo. En realidad es un restaurante no muy grande, con sus mesitas en la calle como todos los brasseries de Paris.
Continué andando por la place de la Concorde y al poco llegué a la Avenue des Champs Elysées. Si ya me impresiono en octubre pese a la lluvia y el barro de la calle, no me imagino lo bonita que sera en diciembre, en pleno ambiente de Navidad. Dos aceras inmensas y un sinfin de tiendas y cafeterias a cada lado. Y al comienzo de la avenida, el Petit Palais. Esta foto de la esquina de Cartier esta dedicada a mi abuela.
Fui hasta el Arco del Triunfo y después volvi andando por la otra acera. Como ven, era un dia gris, pero aun asi disfrute mucho del paseo. Cuando volvi a casa, eran las siete de la tarde, y me senti mas animada como para seguir completando con el manual los apuntes de Droit Public. El "ambiente de trabajo" tambien me estimulo, porque tanto Paola como Ale estaban ocupados con sus respectivas "exposés" de esta semana y supongo que me daba remordimiento de conciencia no estar haciendo yo tambien algo util :) .
ante la insistencia de frikinautico y de lapi ( perdonenme la ausencia de los acentos pero estoy en el teclado gabacho), no puedo menos que contar algo mas, aunque lo cierto es que tampoco hay muchas novedades.
El martes por la tarde sali a dar un paseo a los Campos Eliseos. Eran las cinco y estaba cayendo una llovizna intermitente, como dicen en Santiago, un calabobos, pero no me apetecia nada seguir con la aburrida tarea de pasar apuntes a limpio. No se supone que estoy aqui de Erasmus? Pues a la calle! A conocer Paris, que ya llegara el momento de estudiar.
Es muy facil ir a los Campos Eliseos desde mi casa. Solo hay que seguir la rue Saint Honoré hasta la Place de la Vendôme ( la plaza de la Vendimia). Vendôme es una palabra francesa que me encanta, no sabria decir por qué. A continuacion se encuentra la rue Royale, y saben qué descubri, asi, sin buscarlo a proposito? El cabaret Maxim's! Por un momento dudé de que fuera el mismo de La viuda alegre, ( "I'm going to Maxim's, where all the girls are prim...") pero lo acabo de comprobar en internet y es el mismo. En realidad es un restaurante no muy grande, con sus mesitas en la calle como todos los brasseries de Paris.
Continué andando por la place de la Concorde y al poco llegué a la Avenue des Champs Elysées. Si ya me impresiono en octubre pese a la lluvia y el barro de la calle, no me imagino lo bonita que sera en diciembre, en pleno ambiente de Navidad. Dos aceras inmensas y un sinfin de tiendas y cafeterias a cada lado. Y al comienzo de la avenida, el Petit Palais. Esta foto de la esquina de Cartier esta dedicada a mi abuela.
Fui hasta el Arco del Triunfo y después volvi andando por la otra acera. Como ven, era un dia gris, pero aun asi disfrute mucho del paseo. Cuando volvi a casa, eran las siete de la tarde, y me senti mas animada como para seguir completando con el manual los apuntes de Droit Public. El "ambiente de trabajo" tambien me estimulo, porque tanto Paola como Ale estaban ocupados con sus respectivas "exposés" de esta semana y supongo que me daba remordimiento de conciencia no estar haciendo yo tambien algo util :) .
Victor Hugo
Para darle a este blog un toque mas francés, incluyo el link del video de la cancion "Belle", del musical El Jorobado de Notre Dame. La novela de Victor Hugo es bastante diferente de la version de Disney, en ella la pasion de Frollo por Esmeralda se agrava por el hecho de ser él un archidiacono, es decir, un miembro del clero, y la atraccion que siente por ella el apuesto soldado Phoebus se agrava tambien no solo por haber seducido a la gitana y despues de conseguir su proposito, abandonarla, sino ademas porque estaba prometido a otra mujer. Quasimodo, por su parte, a pesar de ser deforme y desagradable a la vista, es el unico que consigue una amistad verdadera con Esmeralda, porque solo el se dirigio a ella con sentimientos mas puros.
Este es el link: http://www.youtube.com/watch?v=aBXeXBpTVOk
La cancion es de mis favoritas.
Este es el link: http://www.youtube.com/watch?v=aBXeXBpTVOk
La cancion es de mis favoritas.
viernes, 10 de octubre de 2008
Miscelánea
Mes chers compatriots,
Y ya lo último interesante que me queda por contar es que la asignatura de Francés que tengo que cursar por ser Erasmus se llama "La vie artistique dans le XIX siècle". Incluye tanto la pintura, como la literatura y la música del siglo XIX. Los que me conocen bien se podrán imaginar lo emocionada que salí de aquélla clase. Vamos a leer y comentar a Flaubert, Baudelaire, Zola, Guy de Maupassant, una de las clases la daremos en el Musée d' Orsay, y hay que hacer una exposición sobre un artista de la época que te guste. Sobre la marcha se me ocurrió hacerla sobre Wagner. Aunque a lo mejor cambio de idea, ya veremos.
parece que este blog está siendo bastante leído por mi familia y amigos. Hay quien me ha comentado, con mucho cariño, que tenga cuidado con las faltas de ortografía. Quiero disculparme por el estilo a veces apresurado, poco detallista o hasta confuso que pueden tener a veces las entradas, pero es que la mayoría de ellas han sido escritas bien en los ordenadores de la facultad, lo cual significa teclados franceses, que tienen las teclas en otro orden, o bien han sido escritas a toda prisa en el Mc Donalds de turno, con el tiempo justo antes de que cierre. Ésa es la explicación. Con un poco de suerte, la semana que viene tendremos internet en casa, y probablemente lo tengamos antes que la calefacción, porque hasta ahora ni rastro de los señores del gas.
Pasando a otro tema...el domingo pasado Alejandro y yo fuimos por la mañana a hacer footing a las Tullerías. Estuvimos media hora corriendo, que no está mal. Tuvimos que sortear turistas a los que los guías "sueltan en desbandada" por los jardines, abuelitos que sacan al perro a pasear, y los demás deportistas que como nosotros, habían madrugado para dar unas vueltas a las fuentes y estanques del jardín.
Y ya lo último interesante que me queda por contar es que la asignatura de Francés que tengo que cursar por ser Erasmus se llama "La vie artistique dans le XIX siècle". Incluye tanto la pintura, como la literatura y la música del siglo XIX. Los que me conocen bien se podrán imaginar lo emocionada que salí de aquélla clase. Vamos a leer y comentar a Flaubert, Baudelaire, Zola, Guy de Maupassant, una de las clases la daremos en el Musée d' Orsay, y hay que hacer una exposición sobre un artista de la época que te guste. Sobre la marcha se me ocurrió hacerla sobre Wagner. Aunque a lo mejor cambio de idea, ya veremos.
El domingo también fuimos andando hasta la Torre Eiffel. Hacía demasiado viento y no se podía subir. La torre está iluminada en los colores de la Unión Europea por la presidencia francesa de turno. En los Champs de Mars hay un mapa de todos los países que componen la Unión. Ale y yo nos colocamos sobre Canarias, como se ve en la foto. Lo que no se nota es que estábamos a punto de resbalar sobre el suelo lleno de barro por la lluvia, y teníamos que mantenernos en equilibrio.
Esto es todo por ahora. La semana que viene volveré a escribir.
La plaza de los pintores
Mes chers compatriots,
el martes por la tarde Paola y yo fuimos a pasear. Habíamos presentado la exposé de Droit Public por la mañana y nos lo merecíamos. Dejamos nuestras cosas en casa y consultamos en el mapa el camino al Sacre Coeur.
Empezamos a andar por la avenue de l' Opéra y las Galerías Lafayette. En una calle encontramos la biblioteca municipal y cómo no podía ser de otra manera, entramos a hacernos el carnet y sacamos un par de libros.
Y así, seguimos caminando tranquilamente, disfrutando de la buena temperatura y el cielo despejado, sin saber que nos esperaban una serie de calles empinadas antes de llegar, casi sin aliento y por sorpresa, a la plaza de los artistas.
Nos encantó la plaza. Los pintores tienen su caballetes apretujados unos a otros, te miran sonriendo si te detienes a admirar sus obras. La mayoría de ellas eran auténticas maravillas, pero excesivamente caras. Me di cuenta de que un cuadrito de aquéllos alegraría mucho nuestras paredes desnudas, pero no estaba dispuesta a pagar 80 euros por mucho que me gustaran. En cambio, Paola y yo sí estuvimos dispuestas a dejarnos "semi-clavar" por un café y un crêpe sucré en una de las terracitas. Después de la subida, teníamos que recuperar energías.
Al fondo se distinguía la cúpula blanca del Sacre Coeur. Ya desde el último trecho del camino veníamos escuchando las campanadas. Es una Basílica muy bonita, impresiona tanto por fuera como por dentro. Es una pena que los laterales y parte de la fachada estén tan negros y descuidados en algunas partes. La vista de París desde el Sacre Coeur es también impresionante.
Aquí van las fotos de la excursión de ese día:
jueves, 9 de octubre de 2008
El camino que lleva a mi casa
Mes chers compatriots,
sé que desde que publique la primera entrada ha pasado mucho tiempo, y que he tenido el blog muy abandonado. Tanto anunciarlo a bombo y platillo para esto.
Pero no se imaginan lo liados que estamos durante el dia, siempre a la carrera, resolviendo todos nuestros papeleos en los diferentes edificios de Sciences Po. Al principio no nos aclarabamos y nos desconcertaba tener que ir a que nos sellaran el Learning Agreement en la Rue de l'Université, la Inscription Administrative en la Rue de la Chaise, unas clases en la Rue des Saints Pères y otras en la rue Saint Guillaume. Es aue Sciences Po es propietario de todos los edificios del barrio? En fin, parece que ya tenemos casi todo resuelto.
Solo nos queda que nos pongan internet, nos manden la tarjeta del BNP Paribas y nos pongan de nuevo la calefaccion, que nos cortaron el miercoles, asi; de pronto. Se lo dijimos a AnnicK y ella intento resolverlo enseguida, llamando a la empresa y diciendo que en la casa habia un bebe, suponemos que se referia a Paola ;) . Segun ella, un "monsieur très gentil" dice que el viernes manda a los tecnicos. Todavia no sabemos por que nos la cortaron. Hoy me he levantado temprano para calentar los calderos de agua al fuego y asi me he podido lavar la cabeza con agua caliente, como en los viejos tiempos en Ilo. Y es que la condicion de "miserasmus" no nos abandona por mucho que vivamos en una de las mejores zonas de Paris.
Paso ahora a colgar las fotos del camino que conduce a mi casa:
El puente...
La esquina del Louvre...
sé que desde que publique la primera entrada ha pasado mucho tiempo, y que he tenido el blog muy abandonado. Tanto anunciarlo a bombo y platillo para esto.
Pero no se imaginan lo liados que estamos durante el dia, siempre a la carrera, resolviendo todos nuestros papeleos en los diferentes edificios de Sciences Po. Al principio no nos aclarabamos y nos desconcertaba tener que ir a que nos sellaran el Learning Agreement en la Rue de l'Université, la Inscription Administrative en la Rue de la Chaise, unas clases en la Rue des Saints Pères y otras en la rue Saint Guillaume. Es aue Sciences Po es propietario de todos los edificios del barrio? En fin, parece que ya tenemos casi todo resuelto.
Solo nos queda que nos pongan internet, nos manden la tarjeta del BNP Paribas y nos pongan de nuevo la calefaccion, que nos cortaron el miercoles, asi; de pronto. Se lo dijimos a AnnicK y ella intento resolverlo enseguida, llamando a la empresa y diciendo que en la casa habia un bebe, suponemos que se referia a Paola ;) . Segun ella, un "monsieur très gentil" dice que el viernes manda a los tecnicos. Todavia no sabemos por que nos la cortaron. Hoy me he levantado temprano para calentar los calderos de agua al fuego y asi me he podido lavar la cabeza con agua caliente, como en los viejos tiempos en Ilo. Y es que la condicion de "miserasmus" no nos abandona por mucho que vivamos en una de las mejores zonas de Paris.
Paso ahora a colgar las fotos del camino que conduce a mi casa:
El puente...
La esquina del Louvre...
La plaza de las Piramides con la estatua de Juana de Arco en el centro...
domingo, 5 de octubre de 2008
jueves, 2 de octubre de 2008
L'arrivée
Mes chers compatriots,
como suele decir mi abuela, esto ha sido una odisea. Ahora que me encuentro con mis compañeros "miserasmus" aprovechándonos del wifi de un Mc Donald's, creando este blog, seguros al saber que ya tenemos un techo para los próximos cinco meses, se me hacen lejanos los dos primeros días en París. LLegamos el domingo por la noche, pletóricos; después de dejar las maletas en el Hotel des Alliés, dimos un paseo nocturno por Notre Dame. Tomamos nuestro primer crêpe de nutella, que nos ayudó a entrar en calor, mientras charlábamos animadamente y hacíamos planes sobre uno de los puentes que cruzan del Sena. El lunes en cambio, el panorama cambió completamente. Compramos el "Particulier á particulier" y empezamos a llamar a los pisos que nos interesaban. No les suscitábamos demasiada confianza. Fuimos incluso a una inmobiliaria (cosa que queríamos evitar para ahorrarnos los honorarios) y nos dijeron que no tenían nada para nosotros, es más, que lo que pedíamos a estas alturas y por sólo cinco meses era muy difícil de conseguir. Volvimos al hotel por la noche en medio de un grave silencio, y esa noche caímos en la cama agotados y con el ánimo por los suelos. Pero he aquí que el martes llegó nuestro golpe de suerte. Llamamos a una canaria nacionalizada francesa cuya prima es compañera de clases de alemán de la madre de Alejandro, y que tiene una amiga en París que tiene una inmobiliaria. Sí, es complicado de entender así que más vale que lo lean de nuevo. El caso es que nos dirigimos al 3 de rue des Pyramides, el edificio en el que se encuentran tanto la inmobiliaria como el piso en el que ahora vivimos. Así conocimos a Annick, una francesa de unos cincuenta y ocho años enamorada de Canarias y de su perrita Annoushky (de la cual por cierto Paola y yo tenemos un cuadro en nuestro dormitorio). Annick nos enseñó su piso y digamos que fue un flechazo. Enseguida supimos que teníamos que vivir allí. Era perfecto. Bueno, casi, la habitación de Alejandro necesita un repaso, de hecho él está durmiendo por ahora en el sofá cama, pero tan a gusto, y si no pregúntenle, jeje. En principio los obreros vienen a mitad de octubre a arreglas el techo y el suelo, así que entretanto tiene que dormir en el salón. La descripción de la casa la dejaré para otro día, para cuando pueda añadir fotos. Por ahora sólo diré que estamos en frente del Louvre y del Jardín de las Tullerías y que para ir a Sciences Po sólo tenemos que cruzar el Sena y andar unos diez minutos. Cuando nos vimos firmando el contrato al día siguiente, no podíamos creerlo. ¡Habíamos encontrado donde vivir al segundo día! Es cierto que no pudimos trasladarnos hasta el jueves y que llevar las maletas y el piano de Paola (véase lavalsemilletemps.blogspot.com) se nos hizo interminable. La rue Bethollet se nos hizo al final de lo más antipática. No obstante, ahora que miro hacia atrás, me acuerdo del dueño de la tienda de café que nos vio con las narices metidas en el mapa la primera mañana y se ofreció a ayudarnos, sin que le dijéramos nada; nos metió en su tienda y consultó su propio callejero de París. Me acuerdo también de nuestras conversaciones y las risas nocturnas en la habitación del Hotel des Alliés, de los paninis à quatre fromages que nos servían de almuerzo, de la cara de sorpresa de nuestros compañeros de clase cuando nos presentábamos y decíamos que ya habíamos terminado la carrera de Derecho (nous sommes déjà avocats) ya que el 80% es la primera vez que lo estudian. También me acuerdo de las operaciones matemáticas que hacíamos entre los tres para ver cómo podíamos pagar a Annick teniendo en cuenta que en BBVA de nuestra calle nos ha tratado como si fueramos auténticos extranjeros y apenas nos han dado facilidades para sacar dinero de nuestras cuentas. Y de las noches consumiendo un helado en el Mc Donald's o un café de 3'70 euros en el Starbucks sólo para conectarnos a Internet. Lo único que se me ocurre pensar es: qué buena estrella tenemos.
como suele decir mi abuela, esto ha sido una odisea. Ahora que me encuentro con mis compañeros "miserasmus" aprovechándonos del wifi de un Mc Donald's, creando este blog, seguros al saber que ya tenemos un techo para los próximos cinco meses, se me hacen lejanos los dos primeros días en París. LLegamos el domingo por la noche, pletóricos; después de dejar las maletas en el Hotel des Alliés, dimos un paseo nocturno por Notre Dame. Tomamos nuestro primer crêpe de nutella, que nos ayudó a entrar en calor, mientras charlábamos animadamente y hacíamos planes sobre uno de los puentes que cruzan del Sena. El lunes en cambio, el panorama cambió completamente. Compramos el "Particulier á particulier" y empezamos a llamar a los pisos que nos interesaban. No les suscitábamos demasiada confianza. Fuimos incluso a una inmobiliaria (cosa que queríamos evitar para ahorrarnos los honorarios) y nos dijeron que no tenían nada para nosotros, es más, que lo que pedíamos a estas alturas y por sólo cinco meses era muy difícil de conseguir. Volvimos al hotel por la noche en medio de un grave silencio, y esa noche caímos en la cama agotados y con el ánimo por los suelos. Pero he aquí que el martes llegó nuestro golpe de suerte. Llamamos a una canaria nacionalizada francesa cuya prima es compañera de clases de alemán de la madre de Alejandro, y que tiene una amiga en París que tiene una inmobiliaria. Sí, es complicado de entender así que más vale que lo lean de nuevo. El caso es que nos dirigimos al 3 de rue des Pyramides, el edificio en el que se encuentran tanto la inmobiliaria como el piso en el que ahora vivimos. Así conocimos a Annick, una francesa de unos cincuenta y ocho años enamorada de Canarias y de su perrita Annoushky (de la cual por cierto Paola y yo tenemos un cuadro en nuestro dormitorio). Annick nos enseñó su piso y digamos que fue un flechazo. Enseguida supimos que teníamos que vivir allí. Era perfecto. Bueno, casi, la habitación de Alejandro necesita un repaso, de hecho él está durmiendo por ahora en el sofá cama, pero tan a gusto, y si no pregúntenle, jeje. En principio los obreros vienen a mitad de octubre a arreglas el techo y el suelo, así que entretanto tiene que dormir en el salón. La descripción de la casa la dejaré para otro día, para cuando pueda añadir fotos. Por ahora sólo diré que estamos en frente del Louvre y del Jardín de las Tullerías y que para ir a Sciences Po sólo tenemos que cruzar el Sena y andar unos diez minutos. Cuando nos vimos firmando el contrato al día siguiente, no podíamos creerlo. ¡Habíamos encontrado donde vivir al segundo día! Es cierto que no pudimos trasladarnos hasta el jueves y que llevar las maletas y el piano de Paola (véase lavalsemilletemps.blogspot.com) se nos hizo interminable. La rue Bethollet se nos hizo al final de lo más antipática. No obstante, ahora que miro hacia atrás, me acuerdo del dueño de la tienda de café que nos vio con las narices metidas en el mapa la primera mañana y se ofreció a ayudarnos, sin que le dijéramos nada; nos metió en su tienda y consultó su propio callejero de París. Me acuerdo también de nuestras conversaciones y las risas nocturnas en la habitación del Hotel des Alliés, de los paninis à quatre fromages que nos servían de almuerzo, de la cara de sorpresa de nuestros compañeros de clase cuando nos presentábamos y decíamos que ya habíamos terminado la carrera de Derecho (nous sommes déjà avocats) ya que el 80% es la primera vez que lo estudian. También me acuerdo de las operaciones matemáticas que hacíamos entre los tres para ver cómo podíamos pagar a Annick teniendo en cuenta que en BBVA de nuestra calle nos ha tratado como si fueramos auténticos extranjeros y apenas nos han dado facilidades para sacar dinero de nuestras cuentas. Y de las noches consumiendo un helado en el Mc Donald's o un café de 3'70 euros en el Starbucks sólo para conectarnos a Internet. Lo único que se me ocurre pensar es: qué buena estrella tenemos.
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